La caída del cabello es una de las preocupaciones estéticas más comunes, tanto en hombres como en mujeres. Dos de los tratamientos más conocidos para combatirla son minoxidil y finasteride, medicamentos que han demostrado eficacia para frenar la alopecia y estimular el crecimiento capilar. Sin embargo, es importante entender qué son, cómo actúan y qué efectos secundarios pueden presentar antes de usarlos.

¿Qué es el minoxidil?
El minoxidil es un medicamento de uso tópico aprobado por la FDA para tratar distintos tipos de alopecia, especialmente la alopecia androgenética (calvicie común).
Cómo funciona: actúa como vasodilatador, mejorando la circulación sanguínea en el cuero cabelludo. Esto prolonga la fase de crecimiento del folículo piloso, favoreciendo que el cabello nazca más grueso y fuerte.
Presentación y uso: suele aplicarse en espuma o solución directamente sobre las zonas afectadas, dos veces al día.
¿Qué es el finasteride?
El finasteride es un medicamento de administración oral indicado principalmente para hombres con alopecia androgenética.
Cómo funciona: inhibe la enzima 5-alfa reductasa tipo II, responsable de convertir la testosterona en dihidrotestosterona (DHT), una hormona que debilita los folículos capilares y provoca su caída. Al reducir los niveles de DHT, el cabello se mantiene más tiempo en la fase de crecimiento.
Presentación y uso: se toma en tabletas, generalmente en dosis de 1 mg al día, bajo supervisión médica.
Beneficios comprobados
- Minoxidil: puede aumentar el grosor del cabello y frenar la caída en hombres y mujeres, con resultados visibles a partir de los 3 a 6 meses.
- Finasteride: en hombres, reduce significativamente la caída del cabello y puede estimular el crecimiento en las zonas afectadas.
Posibles efectos secundarios y riesgos
Aunque ambos medicamentos son eficaces, no están exentos de riesgos:
Minoxidil
- Irritación o picazón en el cuero cabelludo
- Sequedad o descamación
- Caída temporal inicial (efluvio) al comenzar el tratamiento
- En casos raros, aumento del vello en otras áreas si el producto se esparce accidentalmente
Finasteride
- Disminución de la libido o problemas de erección (en un pequeño porcentaje de usuarios)
- Posibles alteraciones hormonales
- No se recomienda para mujeres embarazadas o en edad fértil, ya que puede afectar al desarrollo del feto varón
Recomendaciones clave
Consulta médica: nunca empieces estos tratamientos sin la orientación de un dermatólogo o especialista en salud capilar.
Paciencia y constancia: los resultados suelen notarse después de varios meses y requieren uso continuo.
Suspender con cuidado: dejar de usarlos puede provocar que el cabello vuelva a caerse progresivamente.
El minoxidil y el finasteride son herramientas efectivas para combatir la alopecia androgenética, pero su uso debe ser responsable. Antes de incorporarlos a tu rutina, busca la evaluación de un médico especializado que determine la dosis adecuada y supervise su evolución. Así, podrás aprovechar sus beneficios minimizando los riesgos.